Un magnífico documental con el que descubrir la vida más allá de los escenarios de la que es una de las grandes pianistas del siglo XXI.
«Los pianistas tienen que estar solos todo el tiempo, y es difícil ser solitario. Ser músico es casi como llevar una vida muy aislada, y el único momento en que te comunicas es en el escenario, con la música. No es algo malo. Creo que el ser solitarios realmente nos permite pensar en la vida y pensar por qué la gente escribe esta música. [...] Te hace comenzar a preguntarte sobre cosas que están por debajo de la superficie.» Con más de 120 actuaciones al año, Yuja Wang vive un estilo de vida nómada. Viajando por el mundo permanentemente, dos maletas extra pequeñas cargan lo esencial para un viaje de dos semanas: vestidos, zapatos, iPad, iPod y teléfono inteligente. Yuja tiene 31 años y lidera una nueva generación de pianistas que pueden tocar cualquier cosa con comodidad gracias a su pasmosa técnica y una poderosa confianza en sí mismos. Por todo ello se encuentra de frente ante la tradición de grandes virtuosos del piano. Con sus lecturas dinámicas, ella simplemente tiene más que ofrecer que mostrarse únicamente como una dominadora de la técnica. Esta película-documental es un viaje con esta extraordinaria pianista. Además de su apretado horario, lo imprevisible es su otro gran compañero en esta aventura. La exploración en las divagaciones de Yuja revelan sus contradicciones. Es un diario de viaje de lugares emocionantes, ciudades deslumbrantes y encuentros con artistas extraordinarios, como Gustavo Dudamel, Gauthier Capuçon y Leonidas Kavakos, así como otros horizontes profesionales, pero también hay inconvenientes: fatiga, desfase horario, presión, dudas, hostilidades, desorientación y soledad. Con una referencia agridulce a la fugacidad de la vida, el documental revela lo invisible que complementa lo visible. A través de los ojos de Yuja descubre a esta artista de una manera muy personal, equipada con una cámara portátil y su teléfono inteligente, la película quiere ser una especie de diario digital, un reflejo de la imagen que Yuja arroja al mundo. Los directores de la película, Anaïs y Olivier Spiro, han desarrollado una relación muy estrecha con Yuja Wang desde que comenzaron a trabajar con ella en 2010, en el Festival Verbier. Desde entonces, han completado cuatro grabaciones de conciertos de Wang. Ambos han dirigido documentales, grabaciones de ópera y espectáculos de danza, transmisiones en vivo y adaptaciones cinematográficas de óperas desde hace 15 años. También trabajan como directores de fotografía y editores en la mayoría de sus películas, así como en colaboración con otros directores.
Nacida en Pekín, comenzó a estudiar piano a la edad de seis años, ingresando en el Conservatorio Central de Música de Pekín un año después. A los 11 años Wang participa como alumna en el Morningside Music Bridge International Music Festival, del que resulta ser la estudiante más joven. A los 15 años Wang ingresa en el Instituto de Música Curtis de Philadelphia, dónde estudia cinco años con Gary Graffman y se gradúa en 2008. A la edad de 21 años ya era internacionalmente reconocida y daba recitales alrededor del mundo. Desde 2009 tiene contrato exclusivo de grabación con Deutsche Grammophon. En una entrevista con LA Times dijo: «para mí, tocar música es transportarme a otro modo de vida, otra forma de ser. Una actriz hace eso.» Wang proviene de una familia de músicos. Su madre, Zhai Jieming, es bailarina y su padre, Wang Jianguo, es percusionista. Graffman dijo que la técnica de Wang le impresionó durante su audición, pero que «es la inteligencia y el buen gusto» de sus interpretaciones lo que la distingue. Desde 2013 Wang ha actuado con muchas orquestas, incluyendo las de Boston, Chicago, Cleveland, Los Ángeles, Nueva York, Filadelfia, San Francisco y Washington en los EE.UU. En otros países ha actuado con la Staatskapelle Berlín, China Philharmonic, Filarmonica della Scala, Toronto Symphony, Israel Philharmonic, London Philharmonic, Orchestre de París, Orquesta Nacional de España, Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, NHK Symphony en Tokyo, Real Concertgebouw Orquesta, Orquesta Mozart y Orchestra dell'Accademia Nazionale di Santa Cecilia.
Sinopsis:
Yuja Wang se ha ganado la posibilidad de que se le dedique un documental en exclusiva como este, en el que, a través de la mirada de la pianista china y lo que la rodea, Anaïs y Olivier Spiro dan vida a la mujer más allá de la pianista.